SANDÍA (ACENDRÍA, MELÓN DE AGUA, PATILLA)
Categorías
Origen
Los escritos del Dr. David Livingston, médico misionero y explorador de África a mediados del siglo XIX, informan que vio crecer sandía en distritos semidesérticos de ese continente. Registros antiguos prueban que había sido parte de la dieta de las personas desde hace 4,000 años. La sandía es una fruta de enredadera con flores masculinas y femeninas en la misma planta, polinizada por abejas. Es conocida por su forma oblonga, de gran tamaño, 11-18 kg. (25-40 lbs.) y piel de color verde intenso. Recientemente se han desarrollado tamaños más pequeños y formas redondas; incluso formas cuadradas para un fácil transporte. La sandía tiene una pulpa dulce, granulosa de color rojo o amarillo, con semillas que no están confinadas a una cavidad central sino distribuidas a través de la pulpa, que tiene un contenido de agua muy alto y es una fuente de líquido para las personas durante las sequías. Se cultivan más de 1,200 variedades de sandía en todo el mundo. Cada parte de una sandía es comestible, incluso la semilla y la cáscara. Algunas variedades se cultivan estrictamente por la semilla que producen y su pulpa es amarga. Otras, cultivadas para forraje de ganado, tienen la pulpa blanca y seca.
Cultivo
La sandía es un cultivo de clima cálido que puede soportar la sequía y las altas temperaturas. El mantillo/mulch debe retirarse temprano en la temporada de siembra para calentar el suelo y proteger las plántulas. Lo mejor es poner estiércol en el fondo de un hoyo, mezclar la tierra restante con el estiércol y regar bien las semillas sembradas. Se puede sembrar semillas de melón en forma de un anillo alrededor de la sandía para dar sombra a los tallos de la sandía, especialmente en la base. Algunas variedades triploides híbridas no tienen semillas y deben sembarse con variedades con semillas para asegurar la polinización.
La cosecha y producción de semillas
Las sandías están listas para cosechar cuando la superficie de la parte inferior cambia de blanco verdoso a amarillo y luego a crema. Las hojas más cercanas a la fruta también se volverán marrones. Es común que la planta produzca un exceso de flores que se caen. La fruta inmadura no es tan dulce como debería ser y la fruta demasiado madura es harinosa y acuosa. Corte la sandía del tallo, no tire de ella. Cuando la fruta está madura para comer, las semillas también están maduras. Las semillas pueden conservarse quitando la pulpa de las semillas marrones o negras, secándolas bien y almacenándolas en un recipiente cerrado hasta por 5 años.
Plagas y Enfermedades
La sandía es más fuerte que los pepinos u otros melones, pero es aconsejable sembrar semillas resistentes al marchitamiento por fusarium cuando estén disponibles. El daño excesivo causado por algunas enfermedades se puede prevenir usando una mezcla para todo uso de 1 galón (3.8 L) de agua, combinada con una cucharada mediana de bicarbonato de sodio, una gota de jabón líquido para platos y una gota de aceite mineral rociados en ambos lados de las hojas, cada 3-4 días.
Cocina y Nutrición
Su facilidad para prepararla y servirla hace que la sandía sea un alimento favorito para climas cálidos. Contiene un alto nivel de licopeno (más alto que los tomates), un antioxidante que puede proteger contra el cáncer y las enfermedades del corazón. También es rica en vitamina A, B-6, C, ácido fólico y fibra. En algunas culturas es popular hornear las semillas y comerlas como refrigerio. Las cortezas pueden confitarse o encurtirse. La sandía fresca sin cortar puede almacenarse a temperatura ambiente durante dos semanas