Escritor: Dawn Berkelaar
Publicado: 24/7/2019


Hace varios años, en una reunión, un miembro del personal de ECHO se preguntaba en voz alta acerca de la importancia de la alfabetización en la medida en que esta se relaciona con la agricultura. Recibimos retroalimentación de miembros de la red sobre este tema y sus ideas se comparten a continuación.

¿De qué manera la alfabetización afecta la apertura al cambio?

Miriam Noyes, que trabaja con su esposo Ed en el Congo, comentó: “Ahora mismo me encuentro trabajando, por invitación, en el componente de alfabetización de un proyecto agrícola. La gente que trabaja en el área del desarrollo está muy intrigada por el hecho de que son las mujeres educadas, alfabetizadas (los dos términos no son necesariamente inclusivos) quienes están más abiertas al cambio, ya sea en el área de la planificación familiar, las prácticas agrícolas, la salud, etc. Como esas personas lo ven, las mujeres sin educación y analfabetas son las más probables de sentir miedo al cambio y se aferren a las tradiciones ancestrales, y tienden a tomar decisiones y actuar como grupo siguiendo procesos en gran parte invisibles e ilógicos en el sentido clásico. Los agentes de cambio de la alfabetización tienden a tener dificultad para entrar en estas formas de pensamiento y comunicarse efectivamente con mujeres sin educación, analfabetas”.

¿Cuál es el costo de incluir alfabetización en un proyecto de desarrollo agrícola?

Costo financiero: Noyes también comentó sobre los costos de la alfabetización. “El problema al incluir clases de alfabetización en un programa de desarrollo es que toma mucho tiempo y dinero y no está directamente relacionado con los objetivos del programa. Puede verse como una distracción inaceptable con dividendos no probados, a pesar de que las clases de mayor nivel, donde el grupo de la clase puede leer material y discutirlo, son medios perfectos para la diseminación de la información en una comunidad, cualquiera que sea el tema. La ONU estimó que la alfabetización requiere de una inversión de US$10 por persona. Este es probablemente un buen estimado que podemos sortear solamente a través de un mayor trabajo voluntario. Hemos estimado que toma al menos un año de clases bastante concentradas para convertir a una persona analfabeta en alfabetizado funcional”.

Compromiso de mínimo de tiempo: Noyes continuo compartiendo, “En este proyecto para el que se me ha pedido que escriba, solamente están dispuestos a invertir seis meses (del tiempo del proyecto) en alfabetización. Esto podría ser suficiente tiempo para introducir clubes de lectura permanentes en el poblado, para contribuir con los objetivos del proyecto en cuanto a diseminar la información que ellos quieren compartir y llevar a las mujeres a una posición donde decidan implementar acciones específicas como grupo. En términos de alfabetización, estos clubes podrían servir para conservar y consolidar las habilidades de las mujeres, mejorar su vocabulario sobre diversos temas y ayudarles a comprender cosas que hayan leído- objetivos importantes de la alfabetización funcional”.

¿Es la alfabetización necesaria para lograr el éxito en los proyectos agrícolas?

Joann Noel trabaja en Tanzania en el área de alfabetización, en su mayor parte con pastores de iglesias que trabajan en agricultura y sus esposas. Ella escribió, “he estado involucrada en el ministerio de alfabetización desde 2014, ayudo a capacitar maestros principalmente dentro de nuestro curso de sembradores de la iglesia. Tenga en cuenta que nuestras familias sembradoras en la iglesia siembran iglesias en áreas donde no existen, muy a menudo en sitios remotos. La mayor parte de mi experiencia ha sido el trabajo con adultos que pueden leer, [enseñándoles] a enseñar a otros adultos que no pueden. Pero también he pasado algún tiempo ayudando a enseñar a cuatro hombres y a dos mujeres que no podían leer”.

Noel comentó que ella no cree que la alfabetización sea necesaria para el desarrollo agrícola exitoso. Al respecto, expresó: “No creo que [la gente] necesariamente debe estar alfabetizada para aprender nuevas habilidades tales como buenas prácticas agrícolas. Yo sé que aquí existe un pensamiento de grupo, pero el grupo puede ayudar también a que unos a otros se ayuden a recordar. Obviamente, no estoy opuesta a alentar las habilidades de lectura, simplemente no creo que haya que esperar a que la gente esté alfabetizada para avanzar. [Por ejemplo, mi esposo] Mike enseña historias de la Biblia. En una sesión de 45 minutos enseña a la gente como aprender una historia casi al pie de la letra. Tanto los que pueden leer los no lectores pueden hacerlo. Se utiliza tiempo para hacer cautivadora la historia de manera que al final los estudiantes vean como ésta se aplica a ellos mismos. Al final ellos la asumen porque han invertido tiempo y esfuerzo en esto”.

¿Cuáles son algunos de los obstáculos que existen para incorporar la alfabetización en los programas agrícolas?

Retos que enfrentan las mujeres: Noel piensa que la alfabetización es importante y compartió varios obstáculos que existen para la alfabetización, especialmente para las mujeres. “Mi opinión personal es que las mujeres tanzanas tienen más deseos de aprender a leer que los hombres [tanzanos]. Nuestras cifras respaldan [esta opinión], más mujeres que hombres tienden a asistir a clases, pero es más difícil para las mujeres encontrar tiempo para dedicar a clases o al estudio. Desde la perspectiva de un maestro, usaré como ejemplo a una de las mujeres analfabetas a las que enseñé. Teníamos una situación ideal, yo le daba lecciones individuales, ella vivía muy cerca del aula de clases, no se cobraba por las lecciones. Yo solamente le pedía que llevara su cuaderno de notas y un lápiz, pero ella tiene muchos hijos a los que alimentar, agua que acarrear, animales que atender y trabajo que hacer fuera de casa. Después de algunos meses se dio por vencida, y estoy seguro que la razón por la que dejó de asistir a clases fue porque su esposo la presionó para que permaneciera en casa. A propósito, al principio él había estado de acuerdo con la alfabetización de su esposa”.

Potencial falta de confianza en el aprendizaje: Noel añadió, “Otra razón por la que creo que ella paró [de asistir a clases] es un nuevo motivo del que me he venido enterando recientemente y es que [algunos] analfabetos piensan que no pueden aprender. Si esta creencia [es reforzada] por otros, esta falsedad se convierte en realidad”.

Escasez de maestros capacitados: Noel resaltó la importancia de la capacitación, expresando: “Tal vez el mayor reto es encontrar maestros con el corazón y la pasión para enseñar. Si un maestro concibe esto como una oportunidad, un ministerio para servir, entonces el dinero no es necesariamente obligatorio”.

Noel también comentó sobre los retos que enfrentan las mujeres que quieren enseñar. Ella expresó: “Mi ayudante ha observado que las mujeres [tanzanas] tienen sobradas ganas de enseñar. De nuevo, aquí las maestras en África enfrentan un reto único. Dependiendo de su tribu, [varía] el tiempo que deben permanecer en el hogar después de dar a luz. Tenemos dos profesoras muy capaces y devotas que dieron a luz recientemente. ¡Ellas dejaron de enseñar por meses! Que nosotros sepamos, no se había tomado ninguna medida para que sus alumnos siguieran estudiando. La solución parece ser encontrar a otro maestro. Pero siempre sigue existiendo la misma posibilidad de que el maestro, si es una mujer que queda embarazada, tenga que dejar de enseñar. Supongo que si [los maestros] coordinaran sus esfuerzos podría haber cobertura [en una situación de ausencia por maternidad].”

Realidades enfrentadas por los productores:  Algunas veces las realidades agrícolas convierten el aprendizaje en un reto. Noel expresó: “Un gran problema [que enfrentan] nuestros maestros y estudiantes por igual es la sequía y el hambre. Nadie viene a clases si no hay nada de comer. Pero al mismo tiempo, si hay un cultivo que sembrar o cosechar la gente no asistirá a clases. Mi ayudante sugirió algo que quiero considerar seriamente: él expresó que alentáramos a los maestros a impartir clases solamente durante los meses comprendidos entre junio y octubre. Su idea es que la gente tendrá más tiempo libre [para asistir a clases]. [Además], sin lluvia, pueden recibir clases al aire libre. Esto sería una solución al gran problema de falta de instalaciones que enfrentamos en las áreas rurales”.

¿Es la alfabetización una causa o un efecto del desarrollo agrícola?

Cuando busqué en línea información sobre alfabetización y agricultura, no encontré muchas referencias al tema; por ejemplo, el resumen ejecutivo de una publicación de 2006 de la UNESCO sobre alfabetización (Education for All Global Monitoring Report: Literacy for Life) no mencionaba a la agricultura en relación con la alfabetización. La referencia más cercana en ese documento es un comentario sobre el hecho de que, en términos generales, los niveles de alfabetización son menores en las áreas rurales.

Sin embargo, encontré un artículo de Barnes, Fliegel y Vanneman (1982) llamado “Rural Literacy and Agricultural Development: Cause or Effect?” (Alfabetización Rural y Desarrollo agrícola: ¿Causa o Efecto?) Los autores resumen tres etapas históricas relacionadas con el papel de la alfabetización en el desarrollo. En la década de 1950, la alfabetización se consideraba una “fuerza de transformación”. En la década de 1960, el papel de la alfabetización no era visto como algo tan crucial. Los autores escriben, “[Varios estudios realizados en la década de 1960] resaltan el hecho de que, aunque la alfabetización definitivamente puede beneficiar a los productores, hay información relevante para el desarrollo que puede transmitirse de distintas maneras de manera que los analfabetos puedan alcanzar las mismas metas.” Los autores también señalan que la alfabetización puede generar estudiantes con “información y perspectivas que no conduzcan al desarrollo”. Durante la década de 1970 la alfabetización comenzó a verse como una de muchas “causas” del desarrollo, que ayuda a la gente a tener acceso a información útil. Aunque la alfabetización podría no transformar a la gente, puede tener un efecto indirecto en la adopción de prácticas agrícolas.

En su investigación, Barnes et al. trataron de “determinar si la alfabetización es una de las causas o efectos del desarrollo agrícola”. Ellos querían saber específicamente qué impacto tenía la alfabetización sobre la productividad agrícola. Durante los diez años comprendidos entre 1961 y 1971, “la proporción de alfabetizados en la población agrícola en los distritos de la India aumentó en un 5 por ciento durante la década”. (Barnes et al. 1982). La producción agrícola también aumentó- en términos de producción total (de los 12 cultivos más comunes), producción por unidad de tierra y producción por trabajador. Sin embargo, de acuerdo con el análisis de los autores, “la alfabetización no provoca aumentos en la producción o en la productividad agrícolas”. Al profundizar el análisis determinaron que “el efecto de corto plazo de los aumentos de la producción en la alfabetización…en realidad es negativo” pero que “el efecto exclusivamente de largo plazo de la producción es definitivamente positivo”. Concluyeron que “las regiones agrícolas productivas ofrecen un ambiente social y económico facilitador para el crecimiento de largo plazo de la alfabetización rural….[y] el desarrollo agrícola puede ser una manera importante de aumentar el nivel de vida en las áreas rurales, lo que puede a su vez resultar en un aumento de “capital humano” en el largo plazo”.

Ahora es su turno

En su trabajo con pequeños productores, ¿ha encontrado vínculos entre alfabetización y agricultura? ¡Nos encantaría obtener retroalimentación de parte de más miembros de nuestra red! Por favor contáctenos a través de un correo electrónico a echo@echonet.org.

Referencias

Barnes, D.F., F.C. Fliegel, y R.D. Vanneman. 1982. Rural literacy and agricultural development: cause or effect? Rural Sociology 47(2):251-271. 

Noel, Joann. Comunicación personal.

Noyes, Miriam. Comunicación personal.

United Nations Educational, Scientific and Cultural Organization. 2006. Education for All Global Monitoring Report: Literacy for Life. Unesco Publishing. 

Cita este artículo como:

Berkelaar, D. 2019. Alfabetización y Agricultura. ECHO Notas de Desarrollo n.o 144


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