1Las monocotiledóneas (por ejemplo, bananos y cocos) se reestablecen incluso después de haber perdido la mayor parte de su sistema radicular. Una cosa que hay que buscar es si el árbol está partido por debajo del suelo, como sucedió con varios de nuestros cocos. Las dicotiledóneas pueden recuperarse con hasta el 95% de sus raíces absorbentes comprometidas, pero el factor real es el sistema radicular estructural. A veces, una raíz estructural importante se desprende cerca del tronco y puede incluso llevarse con ella un pedazo del tronco. Esta herida gran compromete al árbol y esa parte correspondiente del dosel no será abastecida por el sistema radicular como debería. Las especies difieren en su susceptibilidad a la pudrición de las raíces. En resumen, si no hay raíces estructurales importantes quebrada hasta el tronco, entonces vale la pena intentar recuperar el árbol si tiene valor económico, social o medioambiental.
El huracán Ian derribó árboles en la Finca de Demostración Global de ECHO en el suroeste de Florida en septiembre de 2022. Un árbol caído puede recuperarse si la mayoría de las raíces 1 permanecen adheridas al tronco. Este artículo comparte un proceso paso a paso que el personal de ECHO Florida utilizó después del huracán Irma e implementó después del huracán Ian. Incorpora aportes compartidos por el Dr. Jonathan Crane, Director Asociado del Centro, Profesor y Especialista en Cultivos de Frutas Tropicales en el Centro de Investigación y Educación Tropical (Tropical Research and Education Center). El proceso podría aplicarse a otras zonas afectadas por tormentas y adaptarse en función de los materiales disponibles. Si bien este artículo se centra en la recuperación de árboles caídos, la prevención también es importante. El daño que las tormentas provocan a los árboles puede minimizarse, por ejemplo, seleccionando y podando árboles a fin de que resistan los vientos fuertes. Este proceso es aplicable a los árboles frutales pequeño, cuyo valor justifica el tiempo y el esfuerzo involucrados.
Paso 1: Reunir materiales que un equipo de dos a cuatro personas pueda utilizar tanto para minimizar el estrés de los árboles como para enderezarlos.
Figura 1. Pintura blanca y un rodillo en un cubo. Fuente: Tim Motis
Los materiales a utilizarse a fin de minimizar el estrés de los árboles incluyen (Figura 1):
Pintura de látex blanco a base de agua
Rodillos, esponjas o pinceles para pintar
Cubos para mezclar
Los materiales para anclar árboles en posición vertical incluyen (Figura 2):
2Los postes en T pueden sustituirse por cualquier material de estacas que dure al menos un año para dar al árbol la oportunidad de restablecer su sistema radicular. Las estacas de madera funcionan, de hecho, la mayoría de la gente clava árboles con estacas de madera. Se pueden hacer anclajes fijando el material de cableado a un ladrillo o tronco y enterrándolo en el suelo a suficiente profundidad para que no se salga. El alambre puede sustituirse por cualquier tipo de cuerda, malla o cable. Algunos factores que se tienen en cuenta en la elección del material son su resistencia a la intemperie, su elasticidad y su abrasividad para el tronco. Si no es muy resistente a la intemperie, puede buscar opciones de tratamiento como aplicar alquitrán o cera al material. Si es abrasivo, como el material metálico, ponle algún tipo de acolchado, como yute, ropa vieja o cuñas de madera.
Figura 2. Herramientas para levantar y enderezar árboles. De izquierda a derecha: Postes en T, clavadora de postes, tapón auditivo, alambre, cortadora de alambre y tubo de polietileno. Fuente: Tim Motis
Postes en T u otro material fuerte para el anclaje 2
Clavadora de postes o martillo
Tapones para los oídos (el sonido del golpe en los postes es muy alto)
Alambre (utilizamos alambre de dos capas) o correa/ cuerda para plantas herbáceas y jóvenes
Herramienta para cortar alambre
Tubería o manguera de polietileno (material viejo que no importa cortarlo en longitudes cortas)
Tijeras de podar o cuchillo para cortar tubería de polietileno
Paso 2: Identificar los árboles caídos que pueden salvarse
Figura 3. Árbol caído protegido del estrés térmico con una combinación de escombros (en la base) y pintura de látex blanca. Fuente: Danielle Flood
Buscar árboles con troncos intactos. Un árbol con el tronco partido puede ser demasiado inestable si se endereza. También busque árboles con raíces todavía unidas a los troncos. Si el sistema radicular está fuera del tronco principal, no habrá manera de que el árbol absorba agua y nutrientes. Por último, busque árboles que sean lo suficientemente pequeños para poder ser levantados de manera segura por la fuerza humana y/o el equipo disponible. Pintar una marca o color único en los árboles destinados a ser salvados; esto permite a los trabajadores saber en cuáles centrar sus esfuerzos en términos de salvamento de árboles.
Existen varios factores a tomar en cuenta al priorizar qué árboles levantar primero. Un factor es cuántas raíces están fuera de la tierra, ya que esas serán las que se secan más rápido y mueren. Trees with greater percentages of roots out of the ground should have greater priority in the order of righting. Los árboles con mayores porcentajes de raíces fuera del suelo deben tener mayor prioridad en el orden para levantarlos y enderezarlos. El valor del árbol influye también sobre la prioridad para levantarlo y enderezarlo. El valor lo determina la edad del árbol (un árbol productor tiene más valor que uno recién plantado), la accesibilidad de material vegetativo nuevo, la tasa de crecimiento (un árbol de capulín/ [Muntingia calabura] será fácil de replantar en comparación con los años que tomará una jaboticaba [Myrciaria cauliflora] para comenzar a producir), la demanda de producción y cualquier valor intrínseco.
Figura 4. Mezclando pintura blanca. Fuente: Ashley Dawson
Paso 3: Proteger del sol y de la pérdida de humedad los árboles caídos
El dosel superior de un árbol caído ya no da sombra al dosel inferior ni al suelo. La madera expuesta es susceptible al daño causado por el sol. A menos que usted pueda enderezar los árboles inmediatamente, protéjalos del estrés térmico tan pronto como sea posible después de que caigan. Utilice uno o una combinación de los siguientes métodos:
Cubra la base de los árboles, las raíces expuestas y la madera expuesta de las extremidades principales con desechos. Las hojas de plátano o palma funcionan bien (Figura 3).
Pinte la madera expuesta con una mezcla de agua 50/50 con pintura blanca de látex (Figura 4; Crane y Balerdi, 2006). La pintura blanca refleja la luz del sol, evitando que la madera pintada se sobrecaliente.
Paso 4: Excavar tierra en la base del árbol
La lluvia puede lavar el suelo en la base de los árboles caídos, llenando los agujeros/cavidades creados cuando los árboles cayeron. Excave suficiente tierra alrededor de la base de un árbol para que, una vez que el árbol esté en posición vertical, las raíces estén en la misma profundidad del suelo que antes de caer.
Paso 5: Regar la base de los árboles y considerar la poda del dosel
Figura 5. Agua corriendo de una manguera a la base de un árbol. Fuente: Tim Motis
Antes de levantar y enderezar árboles, aplique una cantidad liberal de agua en la base del árbol. El agua suaviza la tierra y maximiza la flexibilidad de las raíces, lo que reduce su rompimiento mientras se levanta y endereza el árbol. Esto se puede hacer con una manguera conectada a un grifo cercano (Figura 5), o con agua traída a través de regaderas o cubos. La relación raíz-tallo es importante, de modo que si se presenta una cantidad significativa de daño radicular, por consiguiente, podría ser útil podar el dosel. Si el dosel no se poda y el árbol ha perdido muchas raíces alimentadoras, las hojas pueden transpirar a un ritmo más rápido del que las raíces restantes pueden absorber el agua, lo que conducirá a un estrés excesivo. En cambio, si no se presenta una gran pérdida de raíces alimentadoras, no queremos causar heridas innecesarias al podar.
Paso 6: Enderezar el árbol
Primero empotre dos postes en un ángulo de distancia del árbol para que la estaca tenga que atravesar el suelo antes de salirse (Figura 6). Anticipe la dirección en que el árbol se moverá a medida que se endereza. El arco (línea de puntos) mostrado en la Figura 7A representa esto. Teniendo en cuenta esa dirección del movimiento, coloque las estacas de modo que resulte al ángulo de 90 grados mostrado en la Figura 7B. Los postes en T metálicos para cercas pueden tener clavos/ muescas similares a dientes a lo largo de un lado. Empotre el poste con el lado con las muescas alejado del árbol. Esto, y empotrar el poste en un ángulo más o menos perpendicular al alambre, impedirá que el alambre se deslice hacia arriba del poste.
Figura 7. Ángulo para clavar postes en T en relación con el árbol caído. Fuente: Stacy Swartz
Figura 8. Alambre pasado a través de un tubo de polietileno, con el tubo colocado alrededor de una rama. Fuente: Tim Motis
Figura 9. Un árbol con dos juegos de tubos de polietileno y alambre en lugar de uno. Fuente: Tim Motis
Seguidamente, corte suficiente alambre para anclar el árbol a los postes como se muestra en Figura 7B. Corte una sección de tubo de polietileno de unos 30 cm de largo y pase el alambre a través de la sección cortada del tubo de polietileno (Figura 7B y Figura 8). Coloque el pedazo del tubo de polietileno alrededor de una rama fuerte para evitar que con el tiempo el tubo se deslice hacia abajo en el tronco. Seleccione una rama a una altura que dé lugar al ángulo de 45° del alambre que se muestra en la Figura 7B. Para minimizar la tensión en una parte del árbol, que puede ser necesario para árboles más grandes, enrolle el tubo de polietileno alrededor de dos ramas/ tallos separados, como se muestra en la Figura 9. La tubería de polietileno impide que con el tiempo el alambre corte la corteza del árbol. Si no tiene tubo de polietileno o tubos similares, podría usar sacos de yute.
Figura 10. Empujando un árbol hacia arriba. Fuente: Tim Motis
Figura 11. Retorciendo el alambre con una varilla para tensarlo. Fuente: Melissa Hall
Con el alambre y el tubo de polietileno en su lugar, ahora está listo para levantar y enderezar el árbol. Al mismo tiempo levante y empuje el árbol hacia arriba (Figura 10) y luego asegure el cable que va a cada poste. El alambre se puede tensar dando vuelta a los dos hilos de alambre que van a cada poste (se puede colocar una barra/ tubo de 30-40 cm de largo entre los hilos, a mitad de camino entre el poste y el tubo de polietileno, y darle vuelta para torcer el alambre; Figura 11).
Paso 7: “Enlode” el árbol
Con el árbol ahora erguido, examine el suelo en la base del árbol. Usa una pala y/o sus manos para cubrir las raíces expuestas, llenando los huecos de aire/cavidades con tierra húmeda y lodosa. Esto asegura un buen contacto entre el suelo y las raíces.
Pensamientos finales
Una vez que haya enderezado y anclado el árbol con alambre, riéguelo según sea necesario. Tenga cuidado de no regar demasiado. Los árboles que han perdido muchas ramas y hojas necesitarán menos agua que antes.
Un árbol puede perder todas sus hojas por el estrés después de caer, pero todavía puede rebrotar y recuperarse. Si el árbol ha perdido sus hojas y todavía no produce nuevo crecimiento, puede verificar si las ramitas o tallos aún están verdes, saludables y flexibles. La línea de tiempo de la rapidez con la que un árbol rebrota depende de la especie. En nuestra finca, los lichis rebrotaron en unos días mientras que los longanes justo al lado de ellos tardaron unas semanas en rebrotar. Un árbol se ha recuperado cuando ha brotado vegetación saludable.
Después de aproximadamente un año, retire los cables y el tubo de polietileno de soporte. Esto impide que eventualmente puedan ocurrir daños en el árbol. También restaura el movimiento de los árboles en respuesta al viento. El interesante señalar que hay evidencia de que el movimiento de árboles con viento resulta en crecimiento radicular que fortalece la resiliencia de los árboles a las tormentas (Nicoll y Ray, 1996).
Quizás usted también ha aprendido lecciones valiosas sobre la recuperación de árboles después de tormentas. Sus comentarios son bienvenidos y muy apreciados en esta ECHO Conversation!
Crane, J.H. and C. F. Balerdi. 2006. Preparation for and recovery from hurricanes and windstorms for tropical fruit trees in the south Florida home landscape [Preparación y recuperación ante huracanes y tormentas para árboles frutales tropicales en el sur de Florida]. Proceedings of the Florida State Horticulture Society 119:45-49.
Nicoll, B.C. and D. Ray. 1996. Adaptive growth of tree root systems in response to wind action and site conditions [Crecimiento adaptativo de los sistemas radiculares de los árboles en respuesta a la acción del viento y las condiciones del sitio]. Tree Physiology 16:891-898.
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